Cada diciembre, los mercados entran en una fase peculiar. La liquidez se reduce, las mesas de trading se tranquilizan, el sentimiento cambia y, aun así, históricamente, suele surgir un patrón sorprendente.
Diciembre es uno de los meses más singulares del calendario de trading. Con una liquidez más reducida, cambios en el comportamiento del mercado y flujos de fin de año que influyen en la acción del precio, los traders deben mantenerse atentos y estructurados.
Todos los traders tienen algunas fechas marcadas en el calendario cada mes. Para muchos, el primer viernes está en la parte más alta de esa lista. Ese es el día en que se publica el informe de Nóminas No Agrícolas de EE. UU. (NFP), y a menudo establece el tono de los mercados globales durante varios días. Incluso si no operas acciones estadounidenses o el dólar directamente, aún sientes su efecto dominó. El NFP tiene una forma de alinear al mercado en general porque el mercado laboral es una de las ventanas más claras hacia la economía real. Cuando la contratación se fortalece, envía un mensaje. Cuando se debilita, ese mensaje se vuelve aún más fuerte.
La inflación es un motor de los mercados. Cuando se publican nuevos datos de inflación cada mes, los traders de divisas, acciones, bonos y materias primas prestan atención. Un aumento o caída repentina de la inflación puede cambiar rápidamente las expectativas sobre las tasas de interés y mover los mercados.
El petróleo suele llamarse el latido del corazón de la actividad global. Representa alrededor del 3% del PIB mundial y está “presente en todo, desde el equipo de protección personal, plásticos, productos químicos y fertilizantes, hasta… el combustible para el transporte”.