Los bancos centrales están cambiando de rumbo. La Reserva Federal, el BCE y el BoE se han vuelto más dovish a medida que nos acercamos al final de 2025, y ahora se espera ampliamente que recorten las tasas. La inflación está enfriándose lentamente pero de manera constante, y los rendimientos de los bonos están bajando. En teoría, este debería ser el momento perfecto para las acciones de baja duración: financieras, energía y defensivas que dependen de los flujos de efectivo a corto plazo en lugar de las historias de crecimiento a largo plazo.
La última semana de octubre ofreció una mezcla de decisiones de bancos centrales, resultados corporativos y datos macroeconómicos. En Estados Unidos, la Reserva Federal recortó las tasas de interés en 25 puntos básicos durante su reunión del 29 al 30 de octubre, reduciendo el rango objetivo al 3.75%-4.00%.
Why does November always get the benefit of the doubt? Is it a genuine market edge, or just a calendar-based placebo traders use when fundamentals go quiet?
El escenario está preparado: la inflación finalmente se está acercando a los objetivos de los bancos centrales (el PCE subyacente de EE. UU. fue de aproximadamente 2,1 % en abril), y los principales bancos centrales ya hablan de recortes.
La semana estuvo dominada por la incertidumbre política y datos mixtos en las principales economías. En Estados Unidos, el cierre parcial del gobierno se extendió a su tercera semana, retrasando la publicación de varios informes económicos.